El próximo 8 de marzo, las
mujeres nos levantaremos contra el modelo racista e imperialista que invade
nuestra sociedad. Serán dos momentos históricos: en la mañana marcharemos con
las Centrales Obreras y FECODE entre el planetario y la Plaza de Bolívar. Y en horas
de la noche recorreremos la carrera séptima con antorchas, donde de una manera
libre y soberana las mujeres gritaremos nuestros derechos en la calle.
Así lo manifestó Lilia
Avella, una de las más representativas líderesas sociales del país y edilesa de
la JAL de Engativá.
“Ojalá en Colombia vaya
ganando fuerza la idea de que el día de la mujer sean los hombres quienes
lleven los hijos al colegio y se hagan cargo del hogar y que las mujeres tengamos
el día libre en nuestro trabajo para salir a marchar y exigir que no haya más
imperio ni más guerra, donde las únicas que sufrimos las consecuencias somos
las mujeres quienes quedamos huérfanas, viudas y solitarias, de esto está
cansado el país”.
Avella reclama que en
el Plan Nacional de Desarrollo se nombre sólo dos veces a las mujeres, sin un enfoque
de género, sin estadísticas de la situación y sin conocer la condición femenina
en el país. “Tenemos afectación en todos los campos de la vida: en salud,
educación, empleabilidad y en las brechas salariales. Pese a tener los mayores
índices de educación superior, las mujeres ganamos menos que los hombres, hay
una brecha salarial significativa y se ha comprobado que entre más alto es el empleo,
dicha brecha aumenta”. En salud, por ejemplo, la gran mayoría de mujeres son
beneficiarias del SISBÉN y de las que están en régimen contributivo muchas no son
aportantes. “En cuanto a participación política, comunitaria y social, las mujeres
tenemos que romper con el 21% de participación actual y buscar la paridad”.
También afirma que es
grotesco lo que hizo un funcionario de rango nacional recientemente, cuando
afirmó que todas las seguidoras de Petro son putas, no solo porque agrede a las
mujeres petristas, sino porque además agrede a las putas considerando éste como
un término desobligante. “Las putas van a tener que levantarse contra él, porque
irrespeta una condición femenina que ha llevado a las mujeres a buscar
alternativas con su propio cuerpo”.
La invitación es para salir
a marchar
Ante esta situación, la
invitación es para que el próximo 8 de marzo las mujeres salgan a marchar y a
hablar de los derechos, de las falencias, de las exigencias y las garantías que
deben tener, bien sea en actos públicos
o en actos privados.
Dentro de la agenda
existen temas de reflexión: ponerle fin a la violencia de género (Al año se
registran 514 mujeres víctimas de homicidios, 12.048 víctimas de violencia de
pareja, 2.965.646 víctimas del conflicto armado y cerca de 60.000 casos de
desapariciones forzadas de mujeres), justicia reproductiva, derechos laborales,
participación política paritaria de mujeres (en Colombia sólo el 15.6% de
cargos de elección popular son ocupados por mujeres), educación universal
antisexista y feminismo antirracista y antiimperialista, donde se elimine el
patriarcalismo de los actuales gobiernos neoliberales en el mundo, entre otros.