Aunque no es muy frecuente, las mascotas también pueden convivir con alguna discapacidad y hacer su vida normal. Hacemos un llamado a los hogares para que acojan los peluditos sin importar sus limitaciones, pues la mayoría son víctimas de lástima y rechazo en nuestra sociedad.
La historia de Esperanza Fajardo, es realmente conmovedora. Hace 3 años rescató a Vera, una perrita criolla que encontró con su familia en la vía a Medellín cuando recién la había atropellado un auto. Recuerda que su hija Alexandra conmovida rompió en llanto al ver a la cachorrita tirada en la carretera con los ojos salidos y las extremidades superiores fracturadas. Sin pensarlo dos veces la adoptaron y la sometieron a diversas cirugías que lograron recuperarla, pero su pata derecha quedó inmovilizada por múltiples fracturas. Hoy, Vera es una perra inteligente, aseada, cariñosa, inquieta y muy juguetona. En casa permanece con una prótesis que por su gran actividad destroza con frecuencia y a la calle sale con un cabestrillo colgado de su cuello, caminando como si nada pasara, nada triste ni retraída pese a su condición. Esperanza y muchas familias han comprobado que adoptar una mascota con una condición conlleva una serie de responsabilidades que garanticen su bienestar, pero reconocen que es gratificante saber que ante el esfuerzo se obtienen óptimos resultados, pues los animales, contrario a los humanos, poseen un alto índice de superación. Los perros y gatos por ejemplo, ante una pérdida no se ponen tristes ni se deprimen sino que se suelen adaptar fácilmente a su situación.
Existen numerosas discapacidades que las mascotas pueden sufrir. Las más frecuentes son amputaciones, parálisis, enfermedades degenerativas, malformaciones, cegueras, sorderas y hasta pérdida de la voz. No obstante, los peludos no son muy conscientes de su condición y carecen del estigma social que se presenta entre los humanos, por tal razón, su condición no les impide ser felices ni cariñosos. Independiente de su condición física, todas las mascotas necesitan el cariño y cuidados de sus amos. Por ello Esperanza Fajardo invita a adoptar sin importar si la mascota presenta alguna discapacidad. “Ellos también son seres vivos y hay que ayudarlos”, concluye.
¿Cómo cuidar una mascota con alguna discapacidad?
Los cuidados están supeditados a las habilidades previas, las costumbres, la edad y la condición existente, pues cada discapacidad es diferente. Analizaremos las más frecuentes: