Este es el panorama del barrio Mirador II afectado por la desorganización institucional en torno al tema de la ampliación de la avenida Mutis y por la desidia del aeropuerto El Dorado. |
Centenares
de familias conviven con el abandono entre botaderos de basura, roedores,
habitantes de calle y delincuencia, gracias a la desorganización institucional
en el proceso de ampliación de la avenida José Celestino Mutis.
Como si
fuera poco, la constante nube de polvo emanada por obras del aeropuerto les
obliga a permanecer con telas húmedas debajo de sus puertas para proteger a sus
niños y personas mayores de la contaminación.