Ubicado
entre la carrera 104 y la 110 y entre calles 72 a la 80, el barrio Garcés Navas
es la puerta de paso para muchos de los que llegan o salen de Bogotá por la
calle 80. Sus inicios se remontan a finales de la década de los 60, con un
proceso de autoconstrucción liderado por el Instituto de Crédito Territorial,
cuando en el sector sólo había cultivos de trigo, papa, fresas, zanahoria,
entre otros. Hoy, es uno de los barrios más consolidados de la Localidad y su
nombre fue adoptado por la UPZ 73.
Líderes
del barrio Garcés Navas, algunos fundadores, abrieron las puertas de su territorio,
de sus casas y de sus corazones, al equipo periodístico de El Hormiguero, para
compartir las historias que están impregnadas en cada calle, parque o andén que
se recorra. Detrás de lo que hoy ven los espectadores desprevenidos que pasan
por allí, hay muchas anécdotas que dan cuenta del trabajo social y comunitario de
sus residentes, quienes de generación en generación se han caracterizado por
ser luchadores independientes, aguerridos y empoderados de su entorno. Sin duda,
el Garcés es uno de los barrios más privilegiados de Engativá, en sus inicios
contaba con centro médico 24 horas, donde nacieron la gran mayoría de sus
habitantes y de los barrios cercanos. Su imponente iglesia católica ofrece la
bendición a los viajeros que por allí pasan desde la calle 80 buscando la 72,
sus zonas verdes hacen amable el transitar de propios y extraños, el puesto de
bomberos ofrece un parte de tranquilidad y el gigantesco campo de fútbol
convoca semanalmente cientos de niños, jóvenes y adultos en torno al deporte y
la recreación.